lunes, 23 de noviembre de 2009

Precaución

Le condenaron a más de 40 años de cárcel por la explosión que provocó el incendio de todo un edificio y el de bloques colindantes. Después de la detonación, las fuerzas especiales y los francotiradores que vigilaban la zona irrumpieron en la casa rompiendo sin piedad los restos de las ventanas y cristales que quedaban. "¡Tírese al suelo, tírese al suelo!". "¡Las manos detrás de la cabeza!".

El artefacto causó daños irreparables. La población estaba alertada hacía varios años pero nadie parecía haber seguido al pie de la letra las indicaciones de seguridad. "Esta desgracia se veía venir", comentaban las señoras con sus rulos.

40 años, como decíamos. 40 años en prisión. Y todo porque aquel hombre activó sin querer el sistema de autodestrucción que hace estallar un ordenador si se retira un USB sin seguridad.

1 comentarios:

Daniel Rivas Pacheco dijo...

Jodido Chemiguel, ¡terrorista en Fcom!

Me gusta tu humor irónico